43r 0
Titicoto tocoto tocoto titicoto titicoto yc ontlantiuh
Reproduccion digital
Titicoto tocoto tocoto titicoto titicoto yc ontlantiuh
Titicoto tocoto tocoto titicoto titicoto, así va acabando.
LXI
lxi
Michcuicatl
Canto de pecesdcccxviii
Yn iquac omotlali yn oiuh tompehualoque yntlanepanhuil mexica yhuan tlatilolca
Se compuso cuando fuimos conquistados. Alegoría de los mexicas y los tlatelolcas.dcccxix
Tocoti tocoti tocotititi y tototititi tototiti tocotititi yc ontlantiuh
[43r=] Tocoti tocoti tocotititi y tocotititi tototiti tocotititi, así va acabando.
Ma ompehualo nican ma ya nequetzalo yaye otacico i pascua ya oya ye’coc yn Teotl Temaquixti tlalticpac nica ye nello huiya
824. Que se dé principio aquí, que se levante, ya hemos llegado a la Pascua, ha llegado Dios, el Redentor, a la tierra, aquí, ya en verdad.
Tlatlapalcacamaxochitl tozcuicuiltzetzelihui moxochiotzin topan onpixahui ma yca yca ma neyahpanalo a'niuctzitzinhuan tlalticpac nica cecentlamantihua
825. Flores de colores de mazorca tierna se agitan con variados matices, son tus flores. Sobre nosotros se esparcen. Que con ellas haya atavío, vosotras, hermanas menores, aquí, en la tierra cada cosa tiene su lugar.
Toznenexochiçaquanpapalocihuatl don Palacisco izca moxochitzi ma xonmitotiya oncuica cuican tla’tla’machmoyahuacmoxochiacuetzin ye nohuipiltzi ye ipan aya xiquimonitoti ye mopilahuiltilhuan ichpopotzitzinti cuix mochipa ye nica ca çan totlaneuhcon tlalticpac nica cecentlamantihua yiohuiya
826. Mujer cual loro parlanchín y mariposa florida, don Francisco, he aquí tu flor, baila, cantad, cantad. ± Suavemente el canto se ha esparcido sobre tu falda de agua florida, sobre mi camisa. Haz bailar a tus hijas que dan alegría, las doncellitas. ¿Acaso para siempre aquí? Sólo hemos venido a estar prestados en la tierra, aquí cada cosa tiene su lugar.
Tla xicaquicandcccxv y annicutzitzinhuan in moztla huiptla techontlatiz yn Icelteotl toyazque can ompa ximohua tichpopotzitzinti maniz in cuicatl o ic onnetotiloz in xochitl o tlalticpac nican cecentlamantihua yiohuiya
827. Escuchad hermanas, mañana, pasado, nos esconderá el Dios único. Iremos allá donde hay descarnamiento, nosotras doncellas. Permanecerá el canto, con esto habrá danza de flores en la tierra, cada cosa tiene su lugar.
Yn annocihuapo’huan ye tonquetzalyecmaamantihui oye nican tichpopotzitzinti tocoyecozcamecaihcuixtihui o ye tocuic ye iquiappan Dios Totatzin aytzin ohuiya
828. Vosotras, mujeres como yo, vamos ofreciendo plumas preciosas ± aquí, nosotras doncellas temerosas, vamos entrelazando hermosos collares, son nuestro canto, en el lugar de la lluvia de Dios, Señor Nuestro.
Aytzinicutzin nocihuapotzi tozpapatzi titlatlapalxochitl a nimitzonmama nopilahuiltiltzi tocnotlatemol don Diegoton i tla nimitzitoti iz ca moxochitzin yhuaan mocuictzi tla nimitzonehuili ololotzi aytzin etcetera dcccxvi
829. Temerosa, hermana menor, mujer como yo, la de cabellera amarilla, eres flor de variados colores, te llevo a cuestas, hija mía que das alegría. Nuestra afligida búsqueda, tú don Dieguito, que te haga yo bailar, he aquí tu flor y tu canto, te lo entone yo. envueltita, temerocita.
Tle in ticuicaelcicihuilia ticxochiyoocoya tocnotlatemol ma oyaque o y mopihtzitzihuan in Tetlepanquetzatzi Ilhuicaminatzi oye ticmahuiçohua y iz ca moxochitzi yhuan mocuictzi tla nimitzonehuili ololotzi aytzin
830. ¿A qué suspiras con tu canto? ¿Qué te hacen imaginar las flores? Nuestra afligida búsqueda. Se fueron tus hermanas mayores. A Tetlepanquetzatzi, y a Ilhuicaminatzidcccxvii los vemos con admiración. He aquí tu flor y tu canto, te lo entone yo. ±
Yn on tzinitzcan tonpilihuia o ceceliztiuh toyollotzin toyolia yca teotlatolli tocoyecozcamecaihcuixtihui etcetera
831. Ave tzinitzcan, estás mustia. va reanimándose nuestro corazón, lo que nos hace vivir, con la palabra divina bien vamos entrelazando hermosos collares. ±
Yn ye o ya xamoquetzaca a in ye ompoaltonaldcccxx ca yic onneçahualo ya anteocuitlanepapamichime anqui nelli ye axcan moquetza mozcali o Jesucristo yn Ipaltinemi yn ahua nomatzi yn a o anqui ça nelil ya ye’coc yn ilhuicaquin yn mayauhcampa motlalito ytatzin in Dios ahua nomatzin yn a
832. Erguíos, ya son cuarenta días, en los que se ha ayunado. Sóis variados peces dorados, así ya ahora se levanta, ha resucitado Jesucristo, Aquel por quien vivimos, sobrino mío. Para siempre en verdad ha llegado al cielo, fue a sentarse a la mano derecha de su padre, Dios, sobrino mío.
833. [43v¾] ¿Cómo puedes temer tú, pez dorado? Somos menesterosos, nada es nuestro canto, en el interior del agua. Anhelamos la pluma preciosa del pájaro zanate, el que hace ruido cual cascabel precioso, así le canta al Dios único, sobrino mío. Por esto lloro. ± ¿Es esto acaso nuestro merecimiento?dcccxxi Yo soy pez de la arena, tú eres una pequeña trucha. Ya por nosotros hace la fiesta el obispo, porque somos hechuras de Dios, sobrino mío.